La vida en muchas ocasiones parece una roca... pero no una simple roca, una muy grande, que a medida que la quieres escalar se te presenta cada vez más desafíos, y esto lo entendí al leer un libro que abrió mis ojos al entendimiento y fue que “mientras más aprendes de la vida más cargas le sumas a tu espalda” y todo esto hace que se dificulte escalar, no por esto debes dejar de aprender, el punto está en “vivir lo haces en cada segundo que estás respirando, aprender se convierte en una constante ”
Luego de intentar subir la roca y tener muchas caídas con sus múltiples golpes, veo cómo otras personas como se quedaban observándola sin hacer nada, con esto entendí que no podía pretender hacer lo mismo pues, ¿qué sentido tiene no hacer nada, si no te preparas para enfrentar los retos? Ninguno...entonces me puse en la tarea de buscar las maneras de subir, aunque seguía cayéndome no entendía que pasaba, llegó a mi vida un maravilloso texto, que fue como una revelación, que me decía “extenderé mi mano desde el cielo para salvarte” sin embargo al principio no creí mucho en estas palabras, ya que mi imaginación estaba limitada a pensar o a creer que una mano gigante me subiría a la cima y se acabaría todo esfuerzo, todo dolor, todo golpe, toda herida causada en mis anteriores escaladas , pero para mi sorpresa no era así.
Caminando por las bases de esta roca , rodeándola y pensando, analizando un poco y tomando mi barbilla de cómo podía lograrlo acogí esta frase de una manera diferente y entendí que no necesitaba mi conocimiento para lograrlo si no que la sabiduría provenía en una mano que bajaba directamente del cielo .
Luego de intentar subir la roca y tener muchas caídas con sus múltiples golpes, veo cómo otras personas como se quedaban observándola sin hacer nada, con esto entendí que no podía pretender hacer lo mismo pues, ¿qué sentido tiene no hacer nada, si no te preparas para enfrentar los retos? Ninguno...entonces me puse en la tarea de buscar las maneras de subir, aunque seguía cayéndome no entendía que pasaba, llegó a mi vida un maravilloso texto, que fue como una revelación, que me decía “extenderé mi mano desde el cielo para salvarte” sin embargo al principio no creí mucho en estas palabras, ya que mi imaginación estaba limitada a pensar o a creer que una mano gigante me subiría a la cima y se acabaría todo esfuerzo, todo dolor, todo golpe, toda herida causada en mis anteriores escaladas , pero para mi sorpresa no era así.
Caminando por las bases de esta roca , rodeándola y pensando, analizando un poco y tomando mi barbilla de cómo podía lograrlo acogí esta frase de una manera diferente y entendí que no necesitaba mi conocimiento para lograrlo si no que la sabiduría provenía en una mano que bajaba directamente del cielo .
Se estarán preguntando si funcionó … pues si, llegué a la cima, pero luego de dar tres pasos me encontré con otra roca aún más grande y entendí que esta vida es un desafío diario donde reímos y lloramos, donde sufrimos y gozamos, donde luchamos por algo grande sin saber que nos espera algo aun mayor
Con esto quiero decir “toma tu vida como un paso a paso y nunca tengas miedo de enfrentar esa roca”.
Con esto quiero decir “toma tu vida como un paso a paso y nunca tengas miedo de enfrentar esa roca”.
By: Maribell Perilla, Andres Brochero
Comentarios
Publicar un comentario